No por esperado dejará de ser menos celebrado. El título de Liga para el Real Madrid es cuestión de tiempo, pese al triunfo del Barça en Anoeta. Eso sí, los blancos no tendrán posibilidad alguna de festejar el título de Liga el domingo 24 de abril. Los de Ancelotti aventajan en 15 puntos al Barça, con aún 15 por disputarse para los blancos y 18 para los azulgrana. Es decir, que independientemente de lo que haga el equipo de Xavi ante el Rayo (domingo 24, a las 21:00 horas), el Madrid tendrá que esperar al sábado 30 de abril, en la jornada 34 ante el Espanyol, para conocer exactamente cuándo podrá entonar su 35º alirón. Lo virtual no es matemático, pero, de momento, Atlético y Sevilla no cuentan con posibilidad alguna de entrar en las quinielas desde el triunfo del Madrid en El Sadar. Estas son las posibilidades y cuentas para que el Madrid brinde un nuevo título a la diosa Cibeles…

Campeón ante el Espanyol

Traducción: pasillo del Atleti en el derbi. Es una de las opciones que más ilusiona, por el morbo, al madridismo, aunque la reacción rojiblanca sería una incógnita (si harían pasillo o no; el Madrid se negó a hacérselo al Barcelona hace varias temporadas como protesta porque a ellos no se lo habían hecho tras el Mundial de Clubes, por ejemplo). Hay que dejar claro, antes de cualquier cálculo, que el Barcelona le tiene ganado el golaverage al Real Madrid, así que ningún empate a puntos le valdría a los blancos, matemáticamente, para entonar el alirón.

Dicho esto, si el Barcelona pincha en su partido pendiente frente al Rayo, los de Ancelotti saldrán a esta cita sabiendo que con una victoria serían campeones. Si los culés siguen ganando, el Madrid debería esperar al domingo, día siguiente, y aguardar un tropiezo culé ante el Mallorca. Es decir, podría haber alirón esa jornada, pero no ese día, aunque la distancia podría quedarse a 12 puntos con 12 por jugarse y, sin duda, ya habría atisbos de fiesta.

Campeón en el Metropolitano

AS adelantó hace unas semanas que este supuesto podía darse. Y el tren, de momento, sigue en los firmes raíles hacia ello. Si hemos llegado hasta aquí es porque el Barcelona lo ha ganado todo (Rayo y Mallorca), así que la ecuación es sencilla, los blancos necesitarían mínimo puntuar ante el Espanyol para jugarse el título en la guarida rojiblanca. Tendrían que llegar a esta cita con una diferencia de 10, 11 ó 12 puntos con su inmediato perseguidor. Si llegan con más ya serían campeones y si llegan con menos, no podrían serlo.

El derbi, que nunca es un partido más, esta vez lo sería aún menos. Porque aunque las opciones del Atlético de ser campeón ya sean nulas, evitar que el eterno rival alce un nuevo título de Liga en tu campo pasaría a ser una misión obligatoria. Y para los madridistas, evidentemente, lo contrario: sería la oportunidad de conseguir no sólo otro título, sino además una foto histórica. Tal vez la venganza a Koke, que clavó una bandera rojiblanca en el centro del Bernabéu tras ganar la Copa del Rey. Eso sí, también habrá que contar con el factor Champions y el derbi podría pasar hasta a un segundo plano porque los blancos podrían haberse clasificado para la final de la Champions cuatro días antes, si superan la eliminatoria ante el Manchester City.

Campeón ante el Levante

Para llegar a este escenario habrían tenido que suceder varios tropiezos blancos. Porque el Real Madrid, ganando a Espanyol y Atlético, ya sería campeón, sin importar lo que hagan sus rivales. Pero si los de Ancelotti han pinchado y visto su distancia reducida a 7, 8 ó 9 puntos, es aquí donde se jugarían el título. En caso de llegar con una ventaja de 9 puntos, les valdría un empate, pero si esta fuese de 7 u 8, necesitarían ganar (en todos estos supuestos se da por hecho que el segundo ganaría también; es decir, se explica el ‘peor’ de los supuestos). Haciéndolo, entonarían el alirón.

Campeón en Cádiz

Si el Madrid llega a este escenario, es porque ha encarrilado en una racha de pinchazos preocupante y sus perseguidores, como la otra cara de la moneda, circulan lanzados. Se estaría hablando de una racha espectacular por detrás y un despeño del líder, que podría llegar a esta jornada ya sin serlo en un supuesto la mar de remoto: si lo perdiese todo y el Barcelona lo ganase todo. Los de Ancelotti se jugarían aquí el alirón si llegasen con una renta 4, 5 ó 6 puntos, siendo la situación idéntica a la mencionada anteriormente.

Campeón ante el Betis

En el apartado de opciones improbables, esta es la que más, pero podría darse. El Madrid, sobre el papel, debería llegar a la última jornada sin nada en juego, pero si el Barcelona consiguiese reducir su diferencia en 3 puntos o menos, todo se decidiría en una reedición a ‘la Liga del clavo ardiendo’, ganada por Capello tras una agónica jornada 38. Las cuentas se simplificarían al máximo: el que estuviese por delante dependería de sí mismo y el de detrás, necesitaría ganar y esperar un pinchazo.

Enlaces Relacionados:camisetas futbol baratas